Con motivo de la festividad de San Mateo, el Padre Paulino presidió una Eucaristía en la que se despidió de la comunidad parroquial de San Mateo en Cáceres. Con unas emotivas palabras en las que resumió lo que ha significado para él este cuarto de siglo. “He procurado ir delante en algunas ocasiones, para hacer de guía; en otras he caminado junto a vosotros, como un amigo; y cuando ha sido preciso me he quedado a la retaguardia para animar a unirse a la comunidad a los que se iban quedando rezagados” expresó el P. Paulino.

La celebración terminó con una comida en un restaurante cacereño, a la que asistieron un nutrido grupo de feligreses.

“Padre Paulino, que Dios te bendiga y te dé mucha fuerza para seguir proclamando el Evangelio, en tu nuevo destino, por lo menos con la misma intensidad como lo has hecho entre nosotros durante estos 25 años” expresa Manuel González Hernández, uno de los feligreses y culmina expresando el sentir de una comunidad: “Te queremos”