La primera quincena de junio del presente curso 2012-2013 la estamos dedicando, en la Delegación Diocesana de Catequesis, a clausurar las escuelas de catequistas que están funcionando en los diversos lugares de la diócesis. Por la paz y el encanto que tienen las ermitas, las elegimos para pasar una tarde de convivencia y decir adiós al curso que se va.

La Virgen de Altagracia en Garrovillas, Ntra. Sra. de Argamasa en Riolobos, la Virgen del Encinar en Ceclavín o la ermita del Espíritu Santo entre Valverde del Fresno y Eljas son, entre otros, lugares elegidos para la ante dicha clausura de curso. La tarde en que escribo (14 de junio de 2013) nos ha acogido la antiquísima iglesia prerrománica de Sta. Lucia del Trampal, en Alcuéscar.

Catequistas de Montánchez y del mismo Alcuéscar hemos celebrado la Eucaristía de clausura de la Escuela de Catequistas que ha funcionado en los dos pueblos. Ha sido una gozada: Por el hermoso entorno del lugar, por la iglesia en sí, que pregona catequésicamente nuestra fe trinitaria en los tres ábsides del presbiterio y por la convivencia que fortalece nuestra comunión en una misma fe y una misma tarea en la Iglesia: La transmisión de la fe a la nuevas generaciones. Queremos, desde la Delegación Diocesana de Catequesis y de la parroquia de Alcuéscar, agradecer a la Dirección General de Patrimonio de la Junta de Extremadura los permisos para utilizar la ermita de Sta. Lucía, propiedad hoy de la misma Junta.

Todavía quedan lugares como Ceclavín o el Arciprestazgo de Granadilla en los que no hemos realizado la clausura. Todo se andará. Una vez más, desde aquí, vaya la felicitación y el agradecimiento a todos los catequistas de la diócesis por su inmenso y, a veces, no bien reconocido trabajo en las parroquias y un muy feliz y merecido verano.

Paco Neila, Delegado D. de Catequesis